La bodega comenzó su producción en 2004, vendiendo las uvas a productores de Colonia Caroya. La primera cosecha para elaboración propia recién fue en 2007, cuando estuvo lista la bodega.
Ahora y después del dedicado trabajo que día a día tanto Beatriz Oller como Héctor Jairala, agrandaron sus tierras a 10 hectáreas y lograron con gran satisfacción que todo el proceso de vitivinificación se lleva a cabo en el mismo lugar, con lo cual se asegura el control de calidad en todas las etapas del proceso.